La palabra agricultura que por sus raíces griegas significa ‘cultivar o habitar el área de cultivo’ es decir, trabajar la tierra, deriva en técnicas y procesos para hacer del suelo un espacio que nos dé alimentos. Entonces los términos, agricultura orgánica, agro-ecología, hidroponía, aeroponía, entre muchos otros, se refieren a distintos métodos de cultivo conocidos o practicados. Hemos dado por erróneamente llamar agricultura convencional a aquella que se generó entre los 60’s y 80’s durante la llamada revolución verde, tras la invención de los plaguicidas, y recalco erróneamente pues lo convencional antes de dicha revolución era la agricultura familiar y los sistemas agro-ecológicos (aunque en aquellos tiempos este término no se usaba). Una vez surgido este sistema productivo, y al no conocerse la reacción negativa tanto en plagas como en enfermedades y malezas conocido como resistencia, todos los agricultores sintieron la necesidad de cambiar a estos nuevos métodos, primero porque de una sola aplicación mataban sus problemas, segundo porque lograron, con las maquinarias introducidas, producir grandes extensiones de superficie simultaneamente, y tercero por que aquellos que no la aceptaban, eran sujetos de burla constante por ser retrogradas, cerrados y anticuados. Sin embargo, no paso mucho para que notaran que los plaguicidas ya no funcionaban como al principio, que las plagas pronto se reponían y después de varias aplicaciones continuas ya no surtían ningún efecto; junto con esto empezaron los continuos casos de intoxicación por la aplicación de los productos. Por esto a principios de los 90’s surgen en varios países de Latino América casi de manera simultanea, los procesos y materias agro-ecológicas, en las principales Universidades agrícolas; influenciados por Gliessman y Altieri; estos iniciadores agro-ecológos tuvieron que trabajar duro para hacer que la agricultura orgánica fuera tomada en serio y respetada (trabajo aún en proceso) por los demás investigadores y aquellos que utilizaban ya los agro-químicos sin mesura; luchando contra constantes des-acreditaciones por parte de las grandes compañías de agro-químicos, y teniendo como trabajo la formación de jóvenes que a su vez poco a poco se sumaron a la lucha por el respeto al suelo y la agro-diversidad. Lo más asombroso es como un método de cultivo de apenas 30 años de existencia suplantó tan rápidamente a aquel que llevaba 10000 años funcionando.
Con el nacimiento de la agro-ecológia, y las dificultades que conllevaría sustituir un sistema al que se veía como la única forma de producir, nacieron también un montón de dudas y desconocimiento, pero nacieron también junto con estas incertidumbres, las prisas citadínas, el comercio global, los super mercados y se adueña de nuestra dieta la alimentación a base los productos procesados, así al mismo tiempo las constantes crisis económicas, el olvido y desprestigio del trabajo del campo provocan la fuga de gente a las áreas urbanas y al extranjero a buscar «mejores oportunidades», (pues trabajar de obrero es una fabrica, era mejor que hacerlo en el campo (protegiendo el patrimonio familiar). Provocando con esto el abandono de las áreas rurales. Sin embargo en una pequeña porción de los agricultores, nace la necesidad de regresar a los principios básicos, de aferrarse a las costumbres familiares y de retomar el amor al campo, conservando su patrimonio que les da alimento y sustento. En las ciudades el aumento en las enfermedades como el cancer y diabetes, hacen de buena parte de los citadinos ansiosos por volver al campo o consumir algo que les proporcione certeza, lo cual hace un bum, de algo que parece a veces una moda que es el buscar no solo alimentos sanos, sino cosméticos, botanas y postres, limpios y saludables, este tipo de consumo incentiva la producción orgánica a gran escala, pero también la pequeña agro- ecología familiar, así como los pequeños mercados de agricultores o de productores y artesanos, o tiendas de especialidad. Algunos de estos interesados se vuelven consumidores conscientes, y se acercan a los productores para aprender y dejar de consumir por moda sino por salud. Generan a su vez círculos de consumo, cooperativas y la distribución de canastas con todo tipo de productos de temporada y algunos transformados. Con esto empiezan a surgir estas dudas en las terminologías. Así pues la agricultura orgánica es aquella que sigue ciertos lineamientos establecidos para producir alimentos de forma limpia, es decir, omitiendo el uso de productos de síntesis quimica, que dañen el suelo, agua o aire, la agro-ecología es la ciencia que estudia esta forma de producción y mezcla como en los tiempos pasados la producción de animales y plantas en una misma área productiva con el fin de lograr un equilibrio biótico óptimo, aún es una ciencia mal vista por la agricultura «convencional» y la agricultura a su vez aun es poco apreciada como forma de vida, pero estos movimientos pisan con fuerza y mas en un momento en el que solo tenemos unos cuantos años para reformar nuestro modo de consumo excesivo. ¿tu que opinas? déjanos tus dudas, comentarios o correcciones.